Mar, 05 Dec 2006, 2:21
Asunto:
He sido fumador de tabaco casi 10 años, de los cuales 8 años seguidos no he bajado de una cajetilla diaria. He tomado otras muchas drogas, pero sin duda esta es la peor de todas por muchas razones ( tanto sociales, como legales, como fisiológicas como psicológicas). No entraré en detalles en esta afirmación última porque creo que cada uno puede sacar las conclusiones acertadas en cuanto a qué razones me refiero ( además sería un tostón, otro día quizá me explaye).
Lo que sí tengo claro es que, si ahora soy un no-fumador "activo" ,ni fue por salud ni por dinero ni por hacer deporte ni por apuesta ni por reto personal ni por ningún tipo de autoafirmación ni por intento de hazaña colectiva , apuntar que la ley antitabaco todavía no había salido cuando lo dejé; no fue por nada de eso, típicas excusas para dejar de fumar ocultando la verdadera razón: que se es un drogadicto, y como todo drogadicto , uno sufre continuamente por culpa de su droga, de la necesidad de la dosis pertinente; lo triste es que cuando uno es drogadicto sólo está bien cuando dispone de su droga. Sé que esto es muy difícil de ver para el propio consumidor de drogas duras o semiduras, cuanto más para el propio fumador. Pues bien, lo dejé para disfrutar a tope de vivir, de realizar cualquier cosa, lo dejé para disfrutar de todo; no digo con esto que sólo el tabaco era mi único problema, pero lo que tengo claro es que era un escollo irreconciliable con mi felicidad. Los fumadores saben que bien sienta un cigarrillo con el café después de comer, o al salir del trabajo y tomando unas cañitas con los colegas, o de fiesta , y con el cafecito de la mañana leyendo el periódico, o en la playa o la montaña contemplando el paisaje, o dando un tranquilo paseo simplemente. Pues yo ahora disfruto de todo eso que he dicho, no del cigarro que me fumaba acompañando cada acción, y digo más, disfruto de cada momento,cada segundo, tanto o más que en cualquier momento "especial" de antes fumándome un cigarro.
Esto que acabo de postular es mi opinión, cada cual que piense lo que quiera; a mi personalmente después de diez años fumando el dejarlo me resultó de lo más fácil, quizá algo de ansiedad la primera tarde como no-fumador, pero estaba tan convencido que desde el primer día solamente noté mejora, mejora de mi felicidad, mejora de mi estado de ánimo, mejora de todo. Aconsejo a quien lo quiera dejar que lo deje por convencimiento de que va a ser milisegundo a milisegundo más féliz, cualquier otra razón, según yo creo, implica sacrificio, porque a todos los fumadores les parece que sustituyen un trozo de su felicidad fumando el cigarro por salud, dinero, etc, y se trata de no sustituír nada sino sólo ganar, lo único que se pierde ... de vista es la infelicidad de depender del tabaco para optar a ser feliz por momentos.
Creo que el fumador que dejé de serlo pensando que hace un esfuerzo o un sacrificio, nunca lo habrá dejado de verdad, la idea del tabaco seguirá martilleando su cabeza, y siempre tendrá ganas de algún cigarro en algún momento( ¿un mes, un año, cinco años quizá después de haberlo dejado?) , pienso que de ese modo no merece la pena dejarlo, te tiene que no apetecer nunca más un cigarro; porque como dicen los fumadores, morir nos vamos a morir igual, por lo menos ser feliz. ME ALEGRO POR HABER SIDO FUMADOR, GRACIAS A ELLO SÃ? LO QUE ES DISFRUTAR DE LA VIDA AL NO SERLO.