Dom, 21 Nov 2010, 19:43
Asunto: Re: II carreira da solidariedade - Asociación Xabier Pita,
Mi nombre es Jesús, y el motivo de este mensaje es ofrecer disculpas públicas a Xabier Pita y su asociación.
Yo he sido la persona que he publicado mensajes insultantes en este foro durante la pasada semana.
Me avergüenzo públicamente por haber escrito esos mensajes, y pido perdón a Xabier Pita por ello. La verdad es que no conocía ni a Xabier Pita ni a su ONG, y a raíz de ver la carrera esta semana comencé a escribir primero comentarios razonables, para después continuar con insultos y descalificaciones personales. ¿Qué me llevó a actuar de este modo, a descalificar a esta persona – reitero, que no conozco - y que organiza una carrera benéfica y tiene una asociación caritativa?
Posiblemente algo tan simple como el aburrimiento, la soledad, el anonimato, además de cierto sentimiento de envidia por no tener el valor y la capacidad de poder aportar algo a nuestra sociedad, algo que sí hace este señor. La verdad es que no hay excusa, actué como un auténtico imbécil, irracionalmente, insultando gravemente a alguien que no conocía hace una semana.
El Sr. Pita respondió de modo amable y educado en este foro a mis comentarios, ofreciendo claridad y respeto en todo momento, hasta que mis insultos en dos mensajes ya fueron demasiado lejos. Afortunadamente los responsables de este foro retiraron rápidamente de la web las últimas idioteces que llegué a escribir.
Pido especialmente perdón al Sr. Pita, a sus voluntarios, integrantes de su asociación, a los responsables de esta web, y a todos vosotros por haber escrito estos insultos que no tienen nada que ver con la real labor humanitaria que lleva a cabo esta organización.
Después de haber organizado la carrera hoy, y a pesar de mi reiterado comportamiento insultante e intolerable, el Sr. Pita ha tenido la generosidad de llamarme por teléfono, y, de un modo correcto y amable, ofrecerme la oportunidad de disculparme públicamente por estos insultos. No estoy seguro de que mi comportamiento merezca la generosidad que el Sr. Pita me ha ofrecido, y ha demostrado tener un corazón y una nobleza enormemente superior a la mía. Me he disculpado telefónicamente por mi comportamiento, y sobre todo, quiero agradecerle la bondad que ha demostrado al ofrecerme esta oportunidad de disculparme. Tampoco estoy seguro de que yo, en su situación, hubiera mostrado esa generosidad con alguien que me ha insultado tan gravemente. Me ha dado una lección de humildad y perdón que nunca olvidaré, por que en su mano estaba hacerme pagar de un modo muy duro un castigo que tenía merecido, con graves consecuencias para el resto de mi vida. Gracias sobre todo por esto último Xabier, aparte de tu labor humanitaria demuestras ser generoso de corazón.
Os pido de nuevo a todos perdón por mi comportamiento, y que todo este lamentable episodio al menos yo saque en claro de que debo dejar para siempre este comportamiento, y os ofrezco este testimonio para que conozcáis la valía humana de esta persona, Xabier Pita, y esto lo digo, como todo lo que estoy escribiendo, de un modo absolutamente sincero.
Además de estas disculpas públicas, me gustaría compartir con vosotros y con Xabier Pita dos medidas adicionales que humildemente ofrezco a esta persona y a esta organización para compensar en parte mis inadmisibles estupideces. Me comprometo a ingresar una cuota mensual en esta ONG durante los próximos tres años para, al menos, contribuir a su desarrollo y compensar mi comportamiento. Por otra parte, me ofrezco a colaborar con esta organización durante los próximos seis meses como voluntario en las tareas que considere oportuno, o en la próxima edición de la carrera para devolver en cierta medida el posible daño que haya causado a esta ONG.
Se me cae la cara de vergüenza al escribir estas palabras.
Me siento más avergonzado además después de haber hablado con Xavier y escucharle ofreciéndome pacientemente una solución que, como os dije antes, no merezco y dice mucho de su persona.
He pensado en ir a ver mañana a Xavier y pedirle disculpas personalmente, si me lo permite me gustaría hacerlo. Me daría Vd. otra lección de humanidad si me permitiese llevar a cabo esta labor de voluntariado en su organización, u en otra si prefiere no volver a saber nada de mí por indeseable. Por favor llámeme o respóndame si me concede esta oportunidad.
En mi único favor sólo tengo que decir que no creo ser un indeseable, sino tal vez una simple persona que está atravesando un momento muy difícil en su vida, con una enorme tristeza interior, que en esta ocasión ha actuado en contra suya sin más motivación que, como he dicho antes, mi enorme soledad y frustración.
Termino mi mensaje agradeciendo humildemente de nuevo a Xavier su comportamiento moral, y pidiéndole de corazón a él y a vosotros perdón.
Gracias,
Jesús