Lun, 30 Mar 2009, 8:33
Asunto: Re: [Concurso] Las crónicas de la Vig-Bay II
MI CRÓNICA:
Querido Samuel,
te resultará extraño que te escriba esta carta, precisamente hoy, cuando haces tu debut en una Media Maratón. He querido hacerme presente en este momento de tu vida, recordando como yo también debuté hace 20 años en una. Es bien cierto que han pasado muchos años, que tú de aquellas eras un niño y yo bastante más joven que ahora… 20 AÑOS SON MUCHOS AÑOS!!!
Por aquel tiempo, hijo mío, comencé a practicar deporte cuando no lo había hecho en mis 35 años de vida. Se me dio por correr. Participaba en un foro de Internet donde gente de todo tipo contaban sus experiencias practicando atletismo; unos eran ya corredores de élite que ganaban carreras y otros eran un poco como yo: se les había metido el gusanillo en el cuerpo y veían que era una buena práctica para mantenerse en forma. No sé si recordarás, bueno… tú tenías sólo 5 años, que me apuntaba yo y te apuntaba a ti a las carreras: Porriño, Padrón, Monforte… y al final, la edición X de la VIG-BAY, cuando sólo llevaba 5 meses corriendo. Tu tío Toño me decía que yo estaba mal… que cómo se me ocurría ir a correr a todos lados, y más aún tantos kilómetros juntos en esa prueba… que Baiona estaba muy lejos de Samil, je. Pero yo me veían con fuerzas, con mucho miedo de enfrentarme a la prueba, pero con gran ilusión y ganas.
Y allá nos fuimos tu madre, tú y el pequeño Sergio que sólo tenía 2 meses de vida. Ya el sábado por la tarde recogimos el dorsal y luego nos alojamos en Baiona. Recuerdo que hacía muchísimo viento y que me empezaron a doler los oídos y la garganta… mal presagio para el día siguiente. Me acompañaste a la farmacia a comprar Paracetamol. La noche fue tranquila, aunque hubo cambio de hora y teníamos una menos para dormir. Tú dormiste de un tirón, tu hermano despertó dos veces para comer y yo, bueno, ¡qué te puedo decir! me desperté como veinte veces hasta la hora de levantarme. Un desayuno tempranito, y autobús para Samil.
¡Qué espectáculo! casi 3.000 personas para correr juntas. Los del foro para una foto de grupo, calentamiento con un chico de Porriño que corría con las mismas ganas que yo, y la emoción máxima: comenzaba puntual la carrera a las 10:30 h. con mis pulsaciones disparadas y no por correr, si no por el nerviosismo. Como aparte de los nervios, estaba muerto de miedo, apareció mi ángel de la guarda, un tal Antonio (creo recordar) que en el foro se apodaba Banderas. Un tipo estupendo, ojalá te coincida encontrarte muchos como él a lo largo de tu vida. Me marcó el ritmo de todo el recorrido: “aquí afloja”, “subida corta pero dura”, “ahora tranquilos que en esta subida de la gasolinera muchos corredores la fastidian”, “aquellas dos son compañeras de trabajo“, “ahora todo llanito hasta la bajada de Playa América”. Con qué energía corría yo, qué bien me encontraba física y psicológicamente, con una respiración acompasada. Ya al final de Playa América, cuando me quedaban 5 kilómetros para llegar, dejé que Banderas tirase a su ritmo y yo fui como pude hasta Baiona, pues una pierna comenzaba a anunciar un pequeño calambre y las plantas de los pies las llevaba hechas polvo.
Recta final y ¡Dios mío! había concluido mi primera Media Maratón. No me lo podía creer. No importaba el tiempo (1 hora 56 minutos 18 segundos reales). Me faltaba el aire, me dio la tos, las piernas parece que querían seguir corriendo pero, todo junto, me daba una de las mayores satisfacciones de mi vida. Y allí estabas tú. Qué emoción verte a ti, a mamá y a Sergio en su sillita en la misma línea de meta. En aquel momento, aparte de lo feliz que me sentía por haber conseguido uno de mis retos, me sentí el hombre más agraciado de la tierra, porque mi familia, a la que más adoro, estaba allí, animándome y haciendo fotos.
Con todo esto, querido Samuel, quiero decirte que espero que tu debut ahora sea agradable. Te comento las tres cosas más importantes que a mí me recomendaron: disfruta! disfruta! disfruta! no te preocupes del tiempo que tardes en llegar, siempre es mejorable. Pero que la carrera sea agradable. Intenta ir con alguien, que te ayuden y si puedes tú, ayuda. Charlando, compartiendo las anécdotas, viendo como la gente os anima a vosotros… los que no vais a ganar la carrera, pero que lleváis más ilusión que los que llegan de primero.
Un beso. Tu padre que te quiere y adora.
Ourense, 30 de marzo de 2029.
"El que no corre, vuela"
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