El 24 de septiembre de 2002, alguien con una idea equivocada acababa con la vida de un joven bueno y lleno de vitalidad, que prestaba servicio como Guardia Civil en Leiza y que al igual que otros cientos – con que facilidad se puede escribir esta cifra, fría y sin sentimientos – fue asesinado por defender y proteger a la sociedad española.
Se llamaba Juan Carlos Beiro Montes y había nacido 32 años antes en Langreo, en las inmediaciones del distrito de Lada. Casado y con dos hijos gemelos, practicó varios deportes y acabó recalando en el atletismo, en las carreras populares, y en la pista de los Llerones de Sama, donde era fácil verle cada vez que un descanso en el trabajo le permitía acercarse a Langreo.
Cada año, la Familia Beiro – Rama y un grupo de amigos, en el aniversario de su muerte, celebran en Leiza una serie de actos sociales que mantienen vivo el recuerdo de Juan Carlos. Casi a un tiempo y en Langreo, tenía lugar una carrera de atletismo de carácter popular, que en adelante, por expreso deseo de la Familia Beiro – Rama y diversas entidades langreanas y autonómicas, Ochobre atletismo se dispone a organizar.
Y será una Media Marathón, porque desde hace más de veinte años se viene celebrando con carácter intermitente, una carrera de esta distancia por las calles de Sama y La Felguera. De ella o merced a la misma, nació el primer Marathón del Valle del Nalón y posteriormente llegaron a organizarse a la vez, dos carreras de los 21 kilómetros. Fue esta la distancia que marcaría o iniciaría una larga trayectoria organizativa en Langreo, que en la actualidad se plasma en pruebas homologadas de 10 km o de Marathón.
La primera edición de la renacida Media Marathón de Langreo, que en principio se iba a denominar o nombrar como “La Carbonera”, gustosamente cede su nombre y en adelante llevará con orgullo el título de “Memorial J.C. Beiro”, con intención de homologarla desde sus inicios, incluirla en el calendario nacional de la RFEA, procurar la asistencia de atletas venidos de toda la Península y que en el trazado del circuito llano se incluya el distrito de Lada, aquel por el que correteó por primera vez la persona que no debemos olvidar: Juan Carlos Beiro.
Una persona buena.
Una persona vital.
Una persona joven.
En definitiva, uno de “los nuestros”.

Una carrera contra todo tipo de violencia, porqué nadie tiene derecho a imponer sus ideas a la fuerza.